
30 Mar CAPÍTULO 2 YANHUITLÁN EN LA ÉPOCA COLONIAL. Lo que queda de la casa del cacique.
En la calle de Juárez esquina con la calle de Morelos, está un enorme muro de más de 10 metros de altura , unos 50 metros de largo y más de un metro de ancho que desde hace más de 480 años está ahí como fiel testigo de que , ni los terribles terremotos, ni las culebras de agua, ni los fuertes remolinos lo han derribado, se ha mantenido incólume a través del tiempo, y en la esquina está la oficina del Comisariado de Bienes Comunales.
* Foto 18.

VESTIGIOS DEL PANTEÓN MÁS ANTIGUO.
Por referencias empíricas, de generaciones anteriores sabía yo que ese cerrito que está antes de bajar al río del panteón, yendo al CBTA ( Centro de Estudios de Bachillerato Tecnológicos Agropecuarios ) había sido panteón en tiempos ancestrales. Hace unos 80 años, cuando íbamos muchos niños de mi generación a jugar al atrio a “ los encantados, ” a “la roña,” etc. veíamos muchas lápidas de sepulcros, eso indica que anteriormente el atrio lo utilizaban como panteón, y probablemente, cuando ya no hubo espacio, fueron a enterrar a sus difuntos a ese cerrito que mencioné anteriormente ; el día 26 de febrero del 2023, fuimos a explorar, digo fuimos porque como siempre me acompañó mi esposa , y comprobé que efectivamente hay vestigios de tumbas ancestrales , anteriores al panteón viejo.* Foto 19.

Después de mucho tiempo, quien sabe por qué motivo, abandonaron ese panteón y se fueron a enterrar a sus difuntos al que conocemos como “el panteón viejo” que se localizaba, por el rumbo de San Sebastián , detrás del panteón actual, de ese panteón, hace unos 80 años aproximadamente, se exhumaron los restos del héroe yanhuiteco Don Justo Rodríguez.
Los restos de este héroe yanhuiteco, se trasladaron al patio central de la escuela primaria que lleva su nombre, el monumento estaba en el centro del que es ahora el auditorio municipal. Pero este tema , lo trataré ampliamente en el capítulo 5.
Es justo decirlo, porque honor a quien honor merece, todo ese proceso, del traslado de los restos de Don Justo Rodríguez lo organizó el director de la Escuela primaria de aquel entonces, profesor Cesar Elías Sosa, ilustre personaje que se involucró mucho en el desarrollo de la comunidad y dejó huellas positivas en el pueblo, que lo recuerda con respeto y con cariño.
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